Ubicado en el corazón del centro histórico de Aguascalientes, este hotel boutique se concibe como una experiencia sensorial donde el lujo, la intimidad y el diseño se entrelazan con la historia y el ritmo de la ciudad.

El proyecto parte de una idea clara: ofrecer a cada huésped un refugio único, lleno de detalles cuidadosamente seleccionados, donde cada rincón cuente una historia. Los materiales elegidos —piedras locales, maderas nobles, textiles artesanales y elementos contemporáneos— se combinan para crear un ambiente cálido, sofisticado y auténtico.

Las habitaciones se diseñan como espacios de calma y contemplación. Muchas ofrecen vistas interiores que garantizan privacidad y tranquilidad, mientras otras abren sus visuales hacia patios, corredores o zonas comunes, permitiendo que los huéspedes se conecten con la vida del hotel sin perder la sensación de resguardo.

La arquitectura se convierte así en un escenario de equilibrio: entre lo íntimo y lo colectivo, lo tradicional y lo contemporáneo, lo funcional y lo emocional. Cada espacio invita a habitar con pausa, a observar los detalles, a disfrutar del silencio tanto como del encuentro.

Este hotel no solo busca hospedar, sino ofrecer una experiencia viva y memorable, profundamente arraigada al espíritu de Aguascalientes.